Los actores nos enfrentamos seguido con esa pregunta. No directamente, pero a poco no te han preguntado:
- ¿Cuánto me cobras por decir una frase vendedora para mi producto?
- ¿Cuánto me cobras por una hora de caracterización de tal personaje en un evento?
- ¿Cuánto me cobras por grabar el mensaje de salida de mi call center?
- ¿Cuánto me cobras por un happening para mi inauguración?
Son gatillos para nuestra mente que normalmente nos ofrece alguno de estos 3 caminos:
1.- Enviamos la cotización rápidamente, sin más ni más. Porque sabemos cuanto valemos o cuánto queremos ganar haciendo eso.
2.- Saltar a preguntarles a los colegas cuánto cobrar, o pedir tabuladores o ahora preguntarle a la IA, como gallinas mojadas.
3.- Decir ¿Cuál es tu presupuesto?
¿Con cuál te identificas? Si te identificas con la 2 o la 3, tienes un problema de autoestima/autovaloración. Aquí te comparto algunos tips:
https://cristinaviartola.com/como-aumentar-tu-confianza-como-artista/
 
				